02/05/2024

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El gobierno de Biden le extendió una mano a Milei, pero le pidió proteger la democracia y combatir el cambio climático

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La Casa Blanca felicitó rápidamente al presidente electo recordando las “prioridades compartidas” en la relación bilateral; abogó por los derechos humanos y el fortalecimiento de la clase media

WASHINGTON.- El gobierno de Joe Biden le extendió una mano abierta al presidente electo Javier Milei, al felicitarlo por su triunfo en el balotaje de la elección presidencial ante Sergio Massa. Pero ante las inocultables diferencias ideológicas con el nuevo gobierno argentino y en medio de las inquietudes en Washington acerca del perfil que tendrá la futura administración del libertario, la Casa Blanca dijo que espera trabajar en “prioridades compartidas”, incluida la protección de los derechos humanos, la democracia, el cambio climático –que Milei niega– y el fortalecimiento de la clase media.

Fiel a la tradición política norteamericana, el gobierno de Biden salió rápidamente a felicitar al nuevo presidente electo argentino apenas se conocieron los primeros datos oficiales del escrutinio. Estados Unidos elogió los comicios al aplaudir el “sólido proceso democrático” y la alta participación en unas elecciones libres, justas y pacíficas.

“Estados Unidos felicita al Presidente electo de Argentina, Javier Milei, por su victoria en las elecciones y aplaudimos el sólido proceso democrático a través del cual el público argentino ha hablado. La fuerte participación y el desarrollo pacífico de la votación son un testimonio de las instituciones electorales y democráticas de la Argentina”, dijo Antony Blinken en un comunicado difundido por el Departamento de Estado.

“Esperamos trabajar con el presidente electo Milei y su gobierno en prioridades compartidas que beneficien a los pueblos de ambos países, incluida la protección de los derechos humanos y la democracia, abordar el cambio climático e invertir en la clase media”, profundizó el jefe diplomático de Biden.

Además de Blinken, el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y el embajador norteamericano en Buenos Aires, Marc Stanley, emitieron declaraciones que tuvieron el mismo denominador común: la mención a la democracia y los derechos humanos, prioridades de la administración demócrata.

Sullivan dijo que esperaban “construir sobre nuestra sólida relación bilateral basada en nuestro compromiso compartido con los derechos humanos, los valores democráticos y la transparencia”. Y desde Buenos Aires, el embajador Stanley publicó en X un mensaje casi calcado en el que mencionó “la protección de los derechos humanos y la democracia, la lucha contra el cambio climático, la mejora del clima de inversiones y la inversión en la clase media”.

No fue el único mensaje desde Estados Unidos. El expresidente y nuevamente candidato presidencial, Donald Trump, le dijo a Milei en su red social Truth Social que estaba “orgulloso” por su victoria y que “hará que la Argentina vuelva a ser grande”, una adaptación de su mantra proselitista, “Make America Great Again”.

Los mensajes que envió Estados Unidos ofrecieron sobradas evidencias de la buena voluntad del gobierno de Biden para trabajar con la futura administración de Milei, quien necesitará si o si del respaldo de la Casa Blanca y el Tesoro para la inminente negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Pero el listado de prioridades que ofreció la administración demócrata también sirvieron como un testimonio de los reparos que existen en Washington respecto de Milei, por más que sea algo habitual en este tipo de mensajes protocolares.

Donald Trump, aliado estadounidense de Javier Milei

La Casa Blanca tenía ya una relación establecida con Massa, con quien existían claras coincidencias ideológicas. Milei ha dicho que priorizará el vínculo con Estados Unidos y con Israel en su política exterior, pero se ha alineado claramente con Trump y, en Brasil, con Jair Bolsonaro, ambos en las antípodas de Biden. Y ha criticado también a aliados del gobierno de Biden, como a Lula, a quien tildó de “comunista”, o al papa Francisco, con quien Biden ha forjado un vínculo estrecho y personal. Biden y Milei tienen un rival común: China, un país que ha ganado enorme influencia en América latina pero con el que Milei ha dejado en claro que tiene escaso interés en estrechar el vínculo bilateral.