Riquelme jugó otra carta fuerte de campaña: confirmó que ya tiene al próximo DT de Boca
4 minutos de lecturaLa derrota con Estudiantes caló hondo en Boca. Porque no fue una eliminación y nada más. El golpe en la Copa Argentina tiene otras connotaciones, un daño colateral profundo que puede ser aún más grave. Para el club, que perdió otra chance para entrar a la Libertadores 2024 y también para Juan Román Riquelme, que el 3/12 se juega la gobernabilidad y la estadía en el jardín de su casa. Por eso el ídolo dio la cara rápidamente y apostó fuerte, jugó un as: confesó que tiene confirmado al próximo DT para el año que viene.
“Nos quedan cuatro o cinco partidos, me parece una locura hablar de un entrenador ahora. Para el año que viene vamos a traer un nuevo técnico. Ya lo vamos a anunciar, estamos bien. Tristes porque queríamos jugar la final”, dijo Riquelme tras la derrota con Estudiantes. Y enseguida, la bombita: “El nuevo técnico ya lo tengo definido. Ya sé bien, lo voy a decir en otro momento. En este año nos faltó un poquito más, hemos ilusionado a los hinchas durante todo el año”.
Riquelme jugó la primera carta fuerte de la campaña política. Hasta ahora sólo habían sido videos mostrando lo que se hizo en el club, lo que se ganó y por qué los hinchas deberían votar el binomio Román-Ameal. Y si bien es cierto que también mencionó por arriba cuáles serían los planes con la Bombonera, el confirmar al entrenador es top.
Los nombres que empiezan a sonar con fuerza
Ahora bien, ¿quién será el técnico que el ídolo ya tiene definido? Por el momento son dos los nombres que tomaron mucha fuerza en el Mundo Boca y que empiezan a posicionarse. El primero es el de Gabriel Milito, el DT de 43 años que viene de dirigir a Argentinos y que rechazó una oferta del Zaragoza.
El menor de los Milito es del gusto del Consejo y de Riquelme. No son amigos, pero sí compartieron mucho tiempo en la Selección y tienen una relación de mutuo respeto. Incluso, el ex DT de Argentinos le había respondido con altura a principios de este año cuando JR dijo que en el fútbol argentino nadie jugaba bien: “Argentinos sí juega bien”, avisó el Mariscal.
Pero no es el único. El otro nombre que estaría sobre la mesa de Riquelme es el de Diego Martínez, el actual técnico de Huracán. Y no sería la primera vez que esté en los planes el entrenador de 45 años, ya que cuando se fue Hugo Ibarra y antes de que llegara Jorge Almirón, también apareció en el radar de Román y del Consejo. De hecho, habló en conferencia de este tema y avisó que aún tenía contrato en Tigre.
A Martínez, que trabajó en las Inferiores de Boca y conoce a muchos de los chicos que hoy están en Primera, le pasa lo mismo hoy en Parque Patricios: tiene contrato hasta junio del año que viene, aunque no existe cláusula de salida. Es, además, uno de los mayores responsables de que el Globo se haya salvado del descenso y esté a un paso de entrar a los playoff de la Copa de la Liga.
No sería la primera vez que Riquelme busca a un DT que no es del riñón del club. Ya le pasó con Jorge Almirón, claro. Y ahora los caminos apuntan a que se inclinaría otra vez por esa misma dirección, aunque él nunca habló de nombres y hasta la tiró afuera cuando le preguntaron por la chance de tener en el banco a un ex Boca (Guillermo, Gago y Arruabarrena, entre otros).
De Scaloni a un técnico extranjero
La de un DT ajeno es una alternativa muy presente. Desde la remota chance de Scaloni, al que los hinchas hicieron viral en las redes luego de que pusiera en duda su futuro en la Selección, hasta la chance de elegir un extranjero como Abel Ferreira o incluso Cuca, por citar algunos nombres de peso.
El interinato de Herrón esta vez no le salió bien a Boca, le costó caro. Tampoco podía salir corriendo a buscar un sucesor de Almirón porque actuar de apuro podía traer consecuencias aún peores y porque hay elecciones en un par de semanas y sería imprudente e irresponsable elegir siendo que esta gestión puede no continuar en 2024.
Casualmente por eso Riquelme ya alzó la voz y confesó que tiene al técnico de Boca para el próximo año. Sí, tiró la primera carta fuerte sobre la mesa. ¿Quién será?