Chiquito Romero: del «por suerte no embocaron el arco» al «le pegaron con mucha violencia»
3 minutos de lecturaEl arquero de Boca contó que no se sentía bien, que «estaba bastante caído», y se quitó méritos tras la quinta definición por penales que gana en el año.
Otra vez por penales, Y otra vez para Boca. Pero esta vez Sergio Romero ni siquiera tuvo que ser el salvador. Simplemente, su presencia parece haber intimidado a algunos jugadores de Talleres que patearon muy desviado. El protio Chiquito lo explicó tras lograr el pase a la semifinal de la Copa Argentina
¿Si se asustan los rivales? «Dije que iba a hacer el esfuerzo para atajar uno o dos penales. No me sentía bien hoy, estaba bastante caído. Por suerte los muchachos de Talleres no embocaron el arco, y eso me ayudó a mí. Mis compañeros hicieron un gran trabajo desde los 12 pasos. La metieron todos. Siempre es importante seguir sumando».
A Chiquito le repreguntaron si pensaba que los errores rivales en la serie, cuando la tiraron tan alto, fue porque lo tenían a él enfrente: «No tengo ni idea, no lo sé. El segundo penal en el que me hacen el gol al ángulo, ni sabía para dónde pateaba. Decidí tirarme a la izquierda y el chico la clavó a la derecha. Sí creo que hoy le pegaron con muchísima violencia a los dos que se les fue muy alto. Esto es así, es un juego mental. Ellos nos sabían si yo hoy estaba bien. Decidieron patear de esa manera».
Romero valoró el partido que hizo Boca en Mendoza: «Creo que hicimos un gran trabajo, deberíamos haber pasado en los 90 minutos. No sé si fue el mejor partido del equipo, pero sí un gran partido. El entrenador encontró el sistema que mejor se nos adapta. Los dos delanteros uruguayos que tenemos corren todo, Pipa también cuando le toca entrar».
«En líneas generales sumamos un montón. En el primer tiempo tuvimos muchas chances de gol. Y en el segundo, más. Este es el camino. Nos dimos cuenta de que hay una sola manera de jugar al fútbol y es no rendirse, pelear, sacrificarse por el de al lado. Los muchachos están haciendo un gran trabajo últimamente», agregó.
Chiquito en acción
Sergio Romero volvió a imponerse. Su imagen. Su seguridad. Su mirada. Su personalidad. Todo eso pesa en los rivales cuando van a patearle un penal. Esta vez lo sufrió Talleres y Boca pasó a la semifinal de la Copa Argentina, luego del 1 a 1 en los 90′. Y no fue necesario que Chiquito atajara un remate. Hubo dos shoteadores, Nahuel Bustos, con experiencia en Europa, y Benavídez, que no tuvieron el temperamento suficiente para patear con la tranquilidad debida y desviaron su tiro por bastante distancia. Y esto sin dudas tuvo que ver la presencia del ex Manchester United enfrente.
Para Boca fue la quinta definición por penales al hilo que supera con Chiquito bajo los tres palos. Es 100% de eficacia. No es un detalle cuando todo el Pueblo Xeneize cuenta los días para la final del Maracaná, del 4 de noviembre, ante Fluminense, para conseguir la ansiada séptima Libertadores.
El balance de Romero es fuerte: le patearon 113 penales en toda su carrera: recibió 80, atajó 27 y seis se desviaron. De los atajados, 14 fueron en etapas de definición y otros 13 en tiempo regular. Desde que está en Boca 14 de los 26 penales que le ejecutaron no fueron goles.
Las definiciones de penales de Chiquito
Ante Nacional: atajó los remates de Polenta y Bocanegra (Libertadores).
Ante Racing: le atajó a Piovi y Sigali (Libertadores).
Ante Palmeiras: le atajó a Raphael Veiga y Gustavo Gómez (Libertadores).
Ante Almagro: le atajó a Nahuel Basualdo y Agustín Maidana (Copa Argentina)
Ante Talleres: Bustos y Benavides desviaron sus remates (Copa Argentina).